1- Copia las líneas en las que se sigue fingiendo la existencia de un autor desconocido para esta historia.
2- Lee detenidamente el soliloquio de Sancho (Pág 42 ed. Cátedra). Observa cómo Sancho ya es capaz de aproximarse al modo de hablar de su amo cuando lo desea. Copia al menos tres expresiones que serían más propias de don Quijote que de su escudero.
3- Continúan los pensamientos, muy bien hilados, de Sancho en los cuales, tras reconocerse a sí mismo como mentecato por seguir a un loco, planea una solución para el encargo que le ha hecho su amo ¿qué razonamiento y qué solución es esta? cópialo literalemte.
4- ¡¡¡¡Qué ha ocurrido!!!! es el mundo al revés... ¡ahora don Quijote ve la realidad y es Sancho el que se inventa un encantamiento! Resúmelo.
5- Otra vez Sancho expresándose como su amo; cópialo.
6- ¿Cuál es la reacción de las mujeres?
7- ¿Qué explicación da el caballero a todo esto? Cópialo.
8- ¿De qué manera paródica termina el encuentro entre esta supuesta Dulcinea y el pobre don Quijote? Explícalo.
9- Siguiendo las características que Sancho va enumerando con sorna de la campesina, dibuja una caricatura de la misma.
1C. Pregunta 1.
ResponderEliminar“Llegando el autor desta grande historia a contar lo que en este capítulo cuenta, dice que quisiera pasarle en silencio, temeroso de que no había de ser creído...”
“Finalmente, aunque con este miedo y recelo, las escribió de la misma manera que él las hizo, sin añadir ni quitar a la historia un átomo de la verdad, sin dársele nada por las objeciones que podían ponerle de mentiroso...”
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ResponderEliminar1C. Pregunta 6.
ResponderEliminarLas mujeres se hallaban atónitas, pero una de ellas rompió el silencio diciéndoles a Sancho y a su amo que se apartasen del camino ya que tenían prisa, y viendo que no les hicieron caso y seguían actuando de una manera extraña, otra de las mujeres decía que se estaban burlando de ellas por ser aldeanas, diciendo con tono de rabia que les dejen hacer su camino, hasta que al final don Quijote pidió a Sancho que se levantase y las dejasen continuar.
A23
ResponderEliminarCapítulo 10
Pregunta 4
Sancho vio venir desde el Toboso a tres aldeanas sobre sus burros dirigiéndose a donde ellos estaban. Aprovechando esta situación decidió decirle a su amo que Dulcinea iba a verle junto a dos de sus doncellas, todas hermosas y arregladas sobre sus caballos blancos. Cuando don Quijote las vio puso en duda la definición de Sancho ya que para él sólo eran tres simples y feas aldeanas. Cuando estuvieron más cerca Sancho hincó la rodilla y continuó con su paripé alabando a su supuesta ama, la cual respondió bordemente que la dejasen pasar para poder continuar su camino. Para entonces don Quijote ya estaba convencido de que el hechicero malvado que le seguía buscando su desgracia había puesto un hechizo en los ojos de Dulcinea y en los suyos para que cuando se mirasen no se reconociesen e inclusive sintiesen rechazo y asco hacia la otra persona.
Sancho, viendo que había triunfado, la dejó pasar pero desgraciadamente esta se cayó de su burro, haciendo que don Quijote intentara inútilmente ayudarla. Al acercarse y olerla se asqueó, sorprendiéndose de que el hechicero llegase tan lejos como para cambiar su olor.
A16
ResponderEliminarCapítulo 10, respuesta a la pregunta 1:
Las líneas en las que se sigue fingiendo la existencia de un autor desconocido serían:
“Llegando al autor de esta grande historia contar lo que en este capítulo cuenta, dice que quisiera pasarle en silencio, temeroso de que no había de ser creído; porque las locuras de don Quijote llegaron aquí al término del raya de las mayores que pueden imaginarse, y aún pasaron los tiros de ballesta más allá de las mayores. Finalmente, aunque con este miedo y recelo, las escribió de la misma manera que las hizo, sin añadir ni quitar a la historia un átomo de la verdad, sin dársele nada por las objeciones Que podían ponerle de mentiroso; y tuvo razón, porque la verdad se adelgaza y no quiebra, y siempre anda sobre la mentira, como el aceite sobre el agua.”
A16
ResponderEliminarCapítulo 10, respuesta a la pregunta 4:
Sancho esperaba para regresar a junto su amo y justo se encontró con tres aldeanas sobre sus burros saliendo del Toboso. Aprovechando esta ocasión fue corriendo a junto el caballero para avisarle de que venía por allí su querida señora Dulcinea del Toboso y junto con dos doncellas. Se acercaron, y fue aquí cuando don Quijote las vio y le dijo a Sancho que solo eran tres aldeanas.
Sancho seguía con su mentira y al acercarse a ellas, se arrodilló y comenzó a halagar a la amada del caballero. Esta le respondió de una mala manera que les dejasen pasar que tenían prisa. Para cuando se estaban alejando, el caballero ya estaba convencido de que aquella era su amada Dulcinea del Toboso y que él no podría reconocerla debido a un encantamiento de un hechicero malvado. Cuando estas estaban marchando, la supuesta Dulcinea cayó de su burro y don Quijote intenta ayudarla, al acercarse a ella y olerla percibió un mal olor, sorprendiéndose ya que dulcinea olía a flores. Sancho insiste en que aquella señora era Dulcinea y y don Quijote dice que es un desdichado, porque por culpa de los hechiceros no había podido ver a su amada.
B5
ResponderEliminarPregunta 2.
"ella al sol de la hermosura y a todo el cielo junto" metáfora que haría don Quijote refiriéndose a Dulcinea, por ser su amada, pero no Sancho.
"Vive Dios si os huele, que os mando mala ventura" aquí aunque no es Sancho el que habla, que está imitando a una persona que se pueda encontrar en el Toboso cuando pregunte por Dulcinea, pero aún así sale de la cabeza del escudero, que creyendo que vive en la época medieval todo el mundo habla así.
"¡El diablo, el diablo me ha metido a mí en esto; que otro no!" no es la primera vez en la obra que vemos a don Quijote quejarse de encantamientos u obras del diablo, ahora es su escudero quién usa estas expresiones.
Pregunta 4: Sancho se inventa que las campesinas en realidad son Dulcinea y sus doncellas que están encantadas pero Don Quijote solo ve a tres simples campesinas.
ResponderEliminarPregunta 7
ResponderEliminarA4
"Y has de advertir Sancho que no se contentaron estos traidores de haber vuelto y transformado a mi Dulcinea,sino que la transformaron y volvieron en una figura tan baja y tan fea como la de aquella aldeana..."
Pregunta 5
ResponderEliminarA4
"Reina y princesa y duquesa de la hermosura,vuestra altivez y grandeza sea servida de recebir en su gracia y buen talente al cautivo caballero vuestro,que allí está hecho piedra mármol,todo turbado y sin pulsos de verse ante vuestra magnífica .Yo soy Sancho Panza su escudero,y él es el asendereado caballero Don Quijote dela Mancha,llamado por otro nombre el Caballero de la Triste Figura."
B5
ResponderEliminarPregunta 8.
Cuando caballero y escudero les dejan ir, pero apenas ha avanzado la campesina unos metros, la montura comienza a tambalearse y ella cae, don Quijote se apresura a levantarla, pero ella rechaza la ayuda y en cuanto puede sale corriendo demostrando una increíble agilidad, digna de la mención de Sancho.
C24
ResponderEliminar2- "Y considere que se suele decir que buen corazón quebranta mala ventura", Don Quijote siempre utiliza palabrerías de este tipo para explicar sus pensamientos o hechos. También a la hora de referirse a las tres labradoras dice: "¿[...] No vee que son estas, las que aquí vienen, resplandecientes como el mismo sol a medio día?", tal y como Don Quijote habría hecho ya que muchas mujeres para él acostumbran a ser damas hermosas. "¡Agora me libre Dios del diablo!" así habría reaccionado Don Quijote si alguien le huebiese dicho que esas muchachas no eran más que labradoras y sin embargo se repite el cambionde papeles y es Sancho quien lo dice.
A0
ResponderEliminarPregunta 1
"Llegando el autor desta grande historia a contar lo que en este capítulo cuenta, dice que quisiera pasarle en silencio, temeroso de que no había ser creído, porque las locuras de don Quijote llegaron aquí al término y raya mayores de las que pueden imaginarse, y aun pasaron dos tiros de ballesta más allá de las mayores. Finalmente, aunque con este miedo y recelo, las escribió de la misma manera que las hizo, sin añadir ni quitar a la historia un átomo de la verdad, sin dársele nada por las objeciones Que podían ponerle de mentiroso; y tuvo razón, porque la verdad se adelgaza y no quiebra, y siempre anda sobre la mentira, como el aceite sobre el agua.”
A2
ResponderEliminarPregunta 1
Las líneas en las que se aprecia como se sigue fingiendo la existencia de un autor aparecen en el primer párrafo, siendo estas lo primero que se lee en este capítulo.
“Llegando al autor de esta grande historia contar lo que en este capítulo cuenta, dice que quisiera pasarle en silencio, temeroso de que no había de ser creído; porque las locuras de don Quijote llegaron aquí al término del raya de las mayores que pueden imaginarse, y aún pasaron dos tiros de ballesta más allá de las mayores. Finalmente, aunque con este miedo y recelo, las escribió de la misma manera que él las hizo, sin añadir ni quitar a la historia un átomo de la verdad, sin dársele nada por las objeciones que podían ponerle de mentiroso; y tuvo razón, porque la verdad se adelgaza y no quiebra, y siempre anda sobre la mentira, como el aceite sobre el agua.”
A0
ResponderEliminarPregunta 3
"Con esto que pensó Sancho Panza quedó sosegado su espíritu, y tuvo por bien acabado su negocio, y deteniéndose allí hasta la tarde, por dar lugar a que don Quijote pensase que le había tenido para ir y volver del Toboso.Y sucedióle todo tan bien que, cuando se levantó para subir en el rucio, vio que del Toboso hacia donde él estaba venían tres labradoras sobre tres pollinos."
Después de haber visto a estas tres mujeres, Sancho decide simular que una de ellas es Dulcinea del Toboso, pues ni él ni don Quijote la habían visto nunca, y esto funcionaría como la mentira perfecta para que don Quijote pensase que Sancho había hecho su trabajo.
B10
ResponderEliminarPregunta 1:
Las líneas son:
“Llegando al autor de esta grande historia contar lo que en este capítulo cuenta, dice que quisiera pasarle en silencio, temeroso de que no había de ser creído; porque las locuras de don Quijote llegaron aquí al término del raya de las mayores que pueden imaginarse, y aún pasaron los tiros de ballesta más allá de las mayores."
A0
ResponderEliminarPregunta 6
Las labradoras se habían quedado atónitas al ver que don Quijote y Sancho se arrodillaban ante ellas.
Aún así, la primera reacción de una de las labradoras fue decirles que se apartasen de su camino, porque llevaban prisa.
B10
ResponderEliminarPregunta 5:
Sancho le recita unas palabras a Don Quijote agradeciéndole todo y alagándolo, diciendo que él era su escudero y que Don Quijote era el Caballero de la Triste Figura.
B10
ResponderEliminarPregunta 6:
Las mujeres quedaron boquiabiertas y en silencio, hasta que una les pidió a los dos si podían pasar ya que tenían prisa, pero ellos no les hicieron caso, otra les preguntó que si se estaban burlando de ellas y tampoco le respondieron hasta que Don Quijote le pidió a Sancho que si se podía levantar y dejar que las señoras siguiesen su camino.
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ResponderEliminarPregunta 4
ResponderEliminarSiendo pues, loco como lo es y de locura que las más veces toma unas cosas por otras y juzga lo blanco por negro y lo negro por blanco, como le pareció cuando dijo que los molinos de viento eran gigantes, y las mulas de los religiosos dromedarios, y las manadas de carneros ejércitos de enemigos, y otras muchas cosas a este tono, no será muy difícil hacerle creer que una labradora, la primera que me toparé por aquí, es la señora Dulcinea, y cuando él no lo crea, jurare yo, ysi el jurare, tornaré yo a jurar, y si porfiare, porfiaré yo más y de manera que tengo de tener la mía siempre sobre el hito,venga lo que viniere, quiza con esta porfia, acabaré con el que no me envíe otra vez a semejantes mensajerías, viendo cuán male recado le traigo de ellas, o quizás, pensara como yo imagino, que algún mal encantador de esto es que el dice que le quede mal la habrá mudado la figura por hacerle mal y daño.
B18
ResponderEliminarPREGUNTA 5:
-¡oh princesa y señora universal del Toboso! ¿Cómo vuestro magnánimo corazón no se enternece viendo arrodillado ante vuestra sublimado presencia a la columna y sustento de la andante caballería?
c4
ResponderEliminarPregunta 4
En este capitulo Sancho no ve las cosas al revés sino que trata de engañar a su amo haciéndole así ver que es el el que delira y esta viendo a una campesina en vez de a la preciosa Dulcinea y con lo cual Don Quijote se deja llevar por Sancho y cree así que uno de los magos le aplico un encantamiento a su amada para verla como campesina en vez de como princesa que ella era.
A17
ResponderEliminarPregunta 1
“”Legando el autor de esta gran historia a contar lo que en este capítulo cuenta, dice que quisiera pasarlo en silencio, temeroso de no ha de ser creído; porque las locuras de don Quijote llegaron aquí al término y raya de las mayores que puedan imaginarse, y aun pasaron dos giros de ballesta más allá de las mayores. Finalmente, aunque con este miedo y recelo, las escribió de la misma manera que él las hizo, sin añadir ni quitar la historia un átomo de verdad, sin dársele nada a las objeciones que podían ponerle de mentiroso; u tuvo razón, porque la verdad adelgaza y no quiebra, y siempre anda sobre la mentira, como el aceite sobre el agua. Y así, prosiguiendo su historia…”
A17
ResponderEliminarPregunta 5
“Reina y princesa y duquesa de la hermosura, vuestra altivez y grandeza sea servida de recibir en su gracia y buen talante al cautivo caballero vuestro, que allí está hecho piedra mármol, todo turbado y sin pulsos de verse ante vuestra magnífica presencia. Yo soy Sancho Panza y él es el asendereado caballero don Quijote de la Mancha, llamado por otro nombre el Caballero de la Triste Figura.”
“¡Oh princesa y señora universal del Toboso! ¿Cómo vuestro magnánimo corazón no se enternece viendo arrodillado ante vuestra sublimada presencia a la columna y sustento de la andante caballería?
A17
ResponderEliminarPregunta 6
Las mujeres reaccionan con enfado, ante lo que ellas pensaban que era una burla de los dos hombres, les piden a los dos que sigan por su camino y que las dejen empezar repetidas veces.
C 17
ResponderEliminar1: “Llegando el autor desta grande historia a contar lo que en este capítulo cuenta, dice que quisiera pasarle en silencio, temeroso de que no había de ser creído; porque las locuras de don Quijote llegaron aquí al término y raya de las mayores que pueden imaginarse, y aun pasaron dos tiros de ballesta más allá de las mayores. Finalmente, aunque con este miedo y recelo, las escribió de la misma manera que él las hizo, sin añadir ni quitar la historia un átomo de la verdad, sin dársele nada por las objeciones que podían ponerle de mentiroso; y tuvo razón, porque la verdad adelgaza y no quiebra, y siempre anda sobre la mentira, como el aceite sobre el agua.
Y así, prosiguiendo su historia…”.
Pregunta 6
ResponderEliminarB23
Las mujeres estaban atónicas porque Don Quijote y Sancho que estaban de rodillas no dejaba pasar a una de ellas.
La detenida les dijo sin gracia que las dejaran pasar que iban con prisa.Otra de las aldeanas le contesta a Sancho ofendida por la burla que él hizo ,finalmente Don Quijote le pide a Sancho que se levante para dejarlas ir
B21
ResponderEliminarcapítulo 10
pregunta 4
Cuando ya iba Sancho a contarle todo lo sucedido a Don Quijote vio a tres aldeanas sobre sus borricos que se aproximaban hacia donde ellos estaban y Sancho aprovechó para seguir con su mentira y hacerle creer a Don Quijote que por ahí venía su hermosa Dulcinea del Toboso, y entonces Don Quijote se puso contento, hasta que las muchachas se fueron acercando más y Don Quijote le decía a Sancho qu eella no era así , que le había mentido , ya que estas muchachas parecían aldeanas y Sancho siempre le decía que no que era él que no veía bien.
Cuando las mujeres se acercaron del todo a ellos, estos se pusieron de rodillas con lo cuál no las dejaban pasar, hablaron con ellas y ellas pensaron que les estaban tomando el pelo por el mero hecho de ser aldeanas y le s pidieron que las dejaran pasar, pero cuando se disponían a salir de allí (pues iban con prisa) uno de sus borricos (el de la aldeana que hacía de Dulcinea) hizo que la aldeana se cayera al suelo y Don Quijote le fue a ayudar mientras Sancho le colocaba la albarada al burro. Cuando Don Quijote se disponía a ayudarla a subir vio como ella sola subió sin ningún problema y las muchachas se fueron rapidamente hasta que la vista de Don Quijote no llegaba mas. Don Quijote le preguntó que clase de silla llebaba y este le dijo que era una muy cara pues entonces tenían dienero.
Este se lamentó como desdichado que era.
Sancho cada vez mentía mejor y ahora el ingenuo era Don Quijote ya que se lo creía todo, hasta lo más rebuscado y loco que a Sancho se pudiese ocurrir.
B21
ResponderEliminarcapítulo 10
pregunta 6
Las mujeres creen que se quieren burlar de ellas porque son unas aldeanas y ellas no van a consentirlo, pues tienen agallas para contestarles. Las aldeanas dan por zanjada la situación y les dicen que tienen prisa y deben ir a hacer su trabajo.
B26
ResponderEliminarPregunta 1:
«Llegando el autor desta grande historia a contar lo que en este capítulo cuenta, dice que quisiera pasarle en silencio, temeroso de que no había de ser creído, porque las locuras de don Quijote llegaron aquí al término y raya de las mayores que pueden imaginarse, y aun pasaron dos tiros de ballesta más allá de las mayores. Finalmente, aunque con este miedo y recelo, las escribió de la misma manera que él las hizo, sin añadir ni quitar a la historia un átomo de la verdad, sin dársele nada por las objeciones que podían ponerle de mentiroso; y tuvo razón, porque la verdad adelgaza y no quiebra, y siempre anda sobre la mentira, como el aceite sobre el agua.»
Resumiendo, dice que pese a temer que le llamasen mentiroso por el nivel de las locuras, el hipotético autor continuará con el relato.
B26
ResponderEliminarPregunta 2:
En el camino llega un momento en el que Sancho se aleja del caballero y comienza un diálogo en solitario (soliloquio) en el cual hay una voz que pregunta con un vocabulario que se asemeja, por no decir que es igual, al del hidalgo, y Sancho las responde. Estas preguntas son referidas a la actividad que están haciendo: la búsqueda de Dulcinea.
Algunos ejemplos de las preguntas son:
«Sepamos agora, Sancho hermano, adónde va vuesa merced».
«Y ¿adónde pensáis hallar eso que decís, Sancho?».
«Y ¿habéisla visto algún día por ventura?».
A8.
ResponderEliminarCapítulo 10, pregunta 1:
"Llegando el autor desta grande historia a contar lo que en este capítulo cuenta, dice que quisiera pasarle en silencio, temeroso de que no había de ser creído, porque las locuras de don Quijote llegaron aquí al término y raya de las mayores que pueden imaginarse, y aun pasaron dos tiros de ballesta más allá de las mayores.
Finalmente, aunque con este miedo y recelo, las escribió de la misma manera que él las hizo, sin añadir ni quitar a la historia un átomo de la verdad, sin dársele nada por las objeciones que podían ponerle de mentiroso; y tuvo razón, porque la verdad adelgaza y no quiebra, y siempre anda sobre la mentira como el aceite sobre el agua."
A8.
ResponderEliminarCapítulo 10, pregunta 2:
"...y ensanche vuestra merced..."
"Voy a buscar, como quien no dice nada, a una princesa, y en ella al sol de la hermosura y a todo el cielo junto."
"¡El diablo, el diablo me ha metido a mí en esto; que otro no!"
A8.
ResponderEliminarCapítulo 10, pregunta 3:
"No será muy difícil hacerle creer que una labradora, la primera que me topare por aquí, es la señora Dulcinea; y cuando él no lo crea juraré yo; y si él jurare, tornaré yo a jurar; y si porfiare, porfiaré yo más, y de manera que tengo de tener la mía siempre sobre el hito, venga lo que viniere. Quizá con esta porfía acabaré con él que no me envíe otra vez a semejantes mensajerías, viendo cuán mal recado le traigo dellas; o quizá pensará, como yo imagino, que algún mal encantador destos que él dice que le quieren mal le habrá mudado la figura por hacerle mal y daño."
A8.
ResponderEliminarCapítulo 10, pregunta 4:
Sancho vio de lejos que se les aproximaban tres labradoras sobre tres borricas, acto seguido fue corriendo a junto de su amo a decirle que una de las tres doncellas que se acercaban era su amada, Dulcinea del Toboso.
Don Quijote no le creía, aún así, Sancho siguió insistiendo en que era ella.
En cuanto se acercaron a ellas, Don Quijote se percató de que eran tres labradoras y no su amada, pero Sancho siguió con la farsa que había planeado minutos antes, y finalmente Don Quijote pensó que era todo culpa de un hechicero y que por eso él no era capaz de ver a su amada ("el maligno encantador me persigue, y ha puesto nubes y cataratas en mis ojos").
A8.
ResponderEliminarCapítulo 10, pregunta 5:
"¡Oh princesa y señora universal del Toboso! ¿Cómo vuestro magnánimo corazón no se enternece viendo arrodillado ante vuestra sublimada presencia a la columna y sustento de la andante caballería?"
A8.
ResponderEliminarCapítulo 10, pregunta 6:
A las tres labradoras les resultó demasiado extraño que Don Quijote y Sancho se hubieran arrodillado ante ellas.
Como llevaban prisa, una de ellas habló, pidiéndoles que se apartaran y que las dejaran pasar.
Al ver que ni Don Quijote ni Sancho hizo caso a ese comentario, otra de las aldeanas añadió, en un tono cortante, que se estaban burlando de ellas y que las dejaran seguir con su camino.
A8.
ResponderEliminarCapítulo 10, pregunta 7:
Don Quijote le echó toda la culpa a un hechicero, diciendo que era él el causante de que no pudiera apreciar la belleza de Dulcinea.
"Y has también de advertir, Sancho, que no se contentaron estos traidores de haber vuelto y transformado a mi Dulcinea, sino que la transformaron y volvieron en una figura tan baja y tan fea como la de aquella aldeana, y juntamente le quitaron lo que es tan suyo y de las principales señoras, que es el buen olor, por andar siempre entre ámbares y entre flores. Porque te hago saber, Sancho, que cuando llegué a subir a Dulcinea sobre su hacanea, según tú dices, que a mí me pareció borrica, me dio un olor de ajos crudos, que me encalabrinó y atosigó el alma."
A8.
ResponderEliminarCapítulo 10, pregunta 8:
En cuanto dejaron marchar a las aldeanas, una de ellas (la que Don Quijote suponía que era Dulcinea) cayó.
El caballero, como haría cualquier cosa por su amada, corrió a ayudarla y le tendió la mano para que pudiera levantarse. Ella rechazó su ayuda, se levantó sola y salió corriendo.
C23 p6
ResponderEliminarLas mujeres, extrañadas porque Don Quijote y Sancho se arrodillaran ante eslla, empezaron a pensar que se estaban mofando de ellas, cuando una de ellas les pidio que las dejaran pasar que tenian prisa, y estes, no se movieron.
Cap.X
ResponderEliminarPreg.1
Se sigue fingiendo un autor desconocido en estas líneas:
“Llegando al autor de esta grande historia contar lo que en este capítulo cuenta, dice que quisiera pasarle en silencio, temeroso de que no había de ser creído; porque las locuras de don Quijote llegaron aquí al término del raya de las mayores que pueden imaginarse, y aún pasaron dos tiros de ballesta más allá de las mayores.
Finalmente, aunque con este miedo y recelo, las escribió de la misma manera que él las hizo, sin añadir ni quitar a la historia un átomo de la verdad, sin dársele nada por las objeciones que podían ponerle de mentiroso; y tuvo razón, porque la verdad se adelgaza y no quiebra, y siempre anda sobre la mentira, como el aceite sobre el agua".
Cap.X
ResponderEliminarPreg.2
-Yo iré y volveré presto.
-Y ensanche vuestra merced ese corazoncillo,que le debe de tener agora no mayor que una avellana ,y considere que se suele decir que buen corazón quebranta mala ventura,y que donde no hay tocinos,no hay estacas...
-Dígolo porque si esta noche no hallamos los palacios o alcázares de mi señora,agora que es de dia los pienso hallar, cuando menos los piense,y hallados,déjenme a mí con ella.
Cap.X
ResponderEliminarPreg.3
El razonamiento y la solución son las siguientes:
"No será muy difícil hacerle creer que una labradora, la primera que me topare por aquí, es la señora Dulcinea; y cuando él no lo crea juraré yo; y si él jurare, tornaré yo a jurar; y si porfiare, porfiaré yo más, y de manera que tengo de tener la mía siempre sobre el hito, venga lo que viniere. Quizá con esta porfía acabaré con él que no me envíe otra vez a semejantes mensajerías, viendo cuán mal recado le traigo dellas; o quizá pensará, como yo imagino, que algún mal encantador destos que él dice que le quieren mal le habrá mudado la figura por hacerle mal y daño".
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarPregunta número 1:
ResponderEliminarEn las siguientes lineas es donde se sigue fingiendo la existencia de un autor desconocido para esta historia:
"Llegando el autor desta grande historia a contar lo que en este capítulo cuenta, dice que quisiera pasarle en silencio, temeroso de que no había de ser creído, porque las locuras de don Quijote llegaron aquí al término y raya de las mayores que pueden imaginarse, y aun pasaron dos tiros de ballesta más allá de las mayores. Finalmente, aunque con este miedo y recelo, las escribió de la misma manera que él las hizo, sin añadir ni quitar a la historia un átomo de la verdad, sin dársele nada por las objeciones que podían ponerle de mentiroso. Y tuvo razón, porque la verdad adelgaza y no quiebra, y siempre anda sobre la mentira como el aceite sobre el agua"
Pregunta número 5:
“¡Oh princesa y señora universal del Toboso! ¿Cómo vuestro magnánimo corazón no se enternece viendo arrodillado ante vuestra sublimada presencia a la columna y sustento de la andante caballería?
Cap.X
ResponderEliminarPreg.4
Sancho Panza quería engañar a Don Quijote para que este pensase que le había tenido para ir y volver del Toboso y le fue todo tan bien que cuando se levantó para subir en el caballo vio que de del Toboso venían tres labradoras sobre tres pollinos,entonces volvió a buscar a Don Quijote y lo encontró suspirando lamentándose por amor. Entonces Sancho le dice que señale este día con almagre. Dicho esto Sancho le aconsejó a don Quijote que picara a rocinante y saliera a ver a su señora dulcinea del toboso .
Salieron de la selva y descubrió a las tres aldeanas don Quijote sólo vio a las tres labradoras y Sancho le asegura que son estas tres hacaneas guapísima. Estas tenían prisa y les dijeron que les dejase sitio entonces Sancho empezó a a lavarlas y estas pensaron que se estaban riendo de ellas Sancho dice que un encantamiento las transformó en Labradora,por lo que finalmente las deja marchar.Y así salió bien de su enredo y ellas se fueron.
Cap.X
ResponderEliminarPreg.5
"Reina y princesa y duquesa de la hermosura,vuestra altivez y grandeza sea servida de recebir en su gracia y buen talente al cautivo caballero vuestro,que allí está hecho piedra mármol,todo turbado y sin pulsos de verse ante vuestra magnífica .Yo soy Sancho Panza su escudero,y él es el asendereado caballero Don Quijote dela Mancha,llamado por otro nombre el Caballero de la Triste Figura".
Cap.X
ResponderEliminarPreg.6
La reacción de las mujeres es pensar que todos esos halagos eran no eran más que una burla ,y les dicen que se aparten porque tienen prisa.
Cap.X
ResponderEliminarPreg.7
Lo que hace Don Quijote es echarle la culpa de no poder apreciar la belleza de Dulcinea a un hechicero.
"Y has también de advertir, Sancho, que no se contentaron estos traidores de haber vuelto y transformado a mi Dulcinea, sino que la transformaron y volvieron en una figura tan baja y tan fea como la de aquella aldeana, y juntamente le quitaron lo que es tan suyo y de las principales señoras, que es el buen olor, por andar siempre entre ámbares y entre flores. Porque te hago saber, Sancho, que cuando llegué a subir a Dulcinea sobre su hacanea, según tú dices, que a mí me pareció borrica, me dio un olor de ajos crudos, que me encalabrinó y atosigó el alma".
Cap.X
ResponderEliminarPreg.8
Cuando apenas se vio libre la señora esta se cayó de la burra lo cual hizo que don Quijote acudiera a levantarla, entonces la señora rechazó la ayuda y se levantó del suelo puso ambas manos sobre la ancas de la pollina y dió un salto tan ligero como el de un alcón.
B7
ResponderEliminarPregunta1:
“Llegando al autor de esta grande historia contar lo que en este capítulo cuenta, dice que quisiera pasarle en silencio, temeroso de que no había de ser creído; porque las locuras de don Quijote llegaron aquí al término del raya de las mayores que pueden imaginarse, y aún pasaron dos tiros de ballesta más allá de las mayores. Finalmente, aunque con este miedo y recelo, las escribió de la misma manera que él las hizo, sin añadir ni quitar a la historia un átomo de la verdad, sin dársele nada por las objeciones que podían ponerle de mentiroso; y tuvo razón, porque la verdad se adelgaza y no quiebra, y siempre anda sobre la mentira, como el aceite sobre el agua.”
CAPITULO X:
ResponderEliminarPregunta nº 1:
-Se sigue fingiendo la existencia de un autor desconocido con las siguientes lineas:
"Llegando el autor desta grande historia a contar lo que en este capítulo cuenta, dice que quisiera pasarle en silencio, temeroso de que no había de ser creído, porque las locuras de don Quijote llegaron aquí al término y raya de las mayores que pueden imaginarse, y aun pasaron dos tiros de ballesta más allá de las mayores. Finalmente, aunque con este miedo y recelo, las escribió de la misma manera que él las hizo, sin añadir ni quitar a la historia un átomo de la verdad, sin dársele nada por las objeciones que podían ponerle de mentiroso. Y tuvo razón, porque la verdad adelgaza y no quiebra, y siempre anda sobre la mentira como el aceite sobre el agua"
CAPITULO X:
ResponderEliminarPregunta nº 6:
-Las mujeres quedan sorprendidas y en el más absoluto silencio al ver que don Quijote y su fiel escudero Sancho se arrodillan ante ellas, hasta que una de ellas rompe el silencio pidiendo que se aparten que llevan prisa.
1C 6
ResponderEliminarPregunta 6:
Las mujeres se encontraban todas pasmadas, hasta que una decidió romper el silencio diciéndoles que se apartasen de su camino ( a Don Quijote y a Sancho) que tenían mucha prisa, pero estés no respondieron ni obedecieron y otra de las mujeres se sintió ofendida, dado que le pareció que se estaban burlando de ellas ante esta situación por ser aldeanas, entonces se harto y cabreada les repitió que se apartasen. Esta vez Don Quijote, cedió y mando a Sancho que las dejase pasar.
A24
ResponderEliminarPregunta 5
" Reina y princesa y duquesa de la hermosura, vuestra altivez y grandeza sea servida de recibir en su gracia y buen talante al cautivo caballero vuestro, que allí está hecho piedra mármol, todo turbado y sin pulsos de verse ante vuestra magnífica presencia. Yo soy Sancho Panza y él es el asendereado caballero don Quijote de la Mancha, llamado por otro nombre el Caballero de la Triste Figura. "
" ¡Oh princesa y señora universal del Toboso! ¿Cómo vuestro magnánimo corazón no se enternece viendo arrodillado ante vuestra sublimada presencia a la columna y sustento de la andante caballería? "
A24
ResponderEliminarPregunta7
" Y has de advertir Sancho que no se contentaron estos traidores de haber vuelto y transformado a mi Dulcinea,sino que la transformaron y volvieron en una figura tan baja y tan fea como la de aquella aldeana... "
A24
ResponderEliminarPregunta 1
"Llegando el autor desta grande historia a contar lo que en este capítulo cuenta, dice que quisiera pasarle en silencio, temeroso de que no había de ser creído, porque las locuras de don Quijote llegaron aquí al término y raya de las mayores que pueden imaginarse, y aun pasaron dos tiros de ballesta más allá de las mayores."
"Finalmente, aunque con este miedo y recelo, las escribió de la misma manera que él las hizo, sin añadir ni quitar a la historia un átomo de la verdad, sin dársele nada por las objeciones que podían ponerle de mentiroso; y tuvo razón, porque la verdad adelgaza y no quiebra, y siempre anda sobre la mentira como el aceite sobre el agua."
Pregunta 1
ResponderEliminarb28
“Llegando al autor de esta grande historia contar lo que en este capítulo cuenta, dice que quisiera pasarle en silencio, temeroso de que no había de ser creído; porque las locuras de don Quijote llegaron aquí al término del raya de las mayores que pueden imaginarse, y aún pasaron los tiros de ballesta más allá de las mayores."
Pregunta 2
ResponderEliminarb28
¨Dígolo porque si esta noche no hallamos los palacios o alcázares de mi señora...´´
´´¡El diablo, el diablo me ha metido a mí en esto; que otro no´´
´´ella al sol de la hermosura y a todo el cielo junto´´
Pregunta 5
ResponderEliminarb28
"Reina y princesa y duquesa de la hermosura,vuestra altivez y grandeza sea servida de recebir en su gracia y buen talente al cautivo caballero vuestro,que allí está hecho piedra mármol.Todo turbado y sin pulsos de verse ante vuestra magnífica .Yo soy Sancho Panza su escudero,y él es el asendereado caballero Don Quijote dela Mancha,llamado por otro nombre el Caballero de la Triste Figura."
Pregunta 6
ResponderEliminarb28
Las mujeres se quedaron sorprendidas, porque Don Quijote y Sancho se arrodillaron ante ellas y ellas pensaron que les estaban tomando el pelo y continuando a lo suyo le dijo que las dejaran pasar que tenian prisa.
A18
ResponderEliminarPregunta 1:
Las líneas aparecen en el primer párrafo y dicen:
"Llegando al autor de esta grande historia contar lo que en este capítulo cuenta, dice que quisiera pasarle en silencio, temeroso de que no había de ser creído; porque las locuras de Don Quijote llegaron aquí al término del raya de las mayores que pueden imaginarse, y aún pasaron dos tiros de ballesta más allá de las mayores. Finalmente, aunque con este miedo y recelo, las escribió de la misma manera que él las hizo, sin añadir ni quitar a la historia un átomo de verdad, sin dársele nada por las objeciones que podían ponerle de mentiroso; y tuvo razón, porque la verdad se adelgaza y no quiebra, y siempre anda sobre la mentira, como el aceite sobre el agua".
A18
ResponderEliminarPregunta 5:
"Reina y princesa y duquesa de la hermosura, vuestra altivez y grandeza sea servida de recibir en su gracia y buen talante al cautivo caballero vuestro, que allí está hecho piedra mármol, todo turbado y sin pulsos de verse ante vuestra magnífica presencia. Yo soy Sancho Panza su escudero, y él es el asendereado caballero Don Quijote de la Mancha, llamado por otro nombre, el Caballero de la Triste Figura".
B20
ResponderEliminarPregunta 3:
El razonamiento y la solución es que como su amo veía cosas donde no las había, hacerle creer que una labradora cualquiera era Dulcinea sería muy fácil. Y así lo dice Sancho:
"(...)no será muy difícil hacerle creer que una labradora, la primera que me topare por aquí, es la señora Dulcinea; y cuando él no lo crea juraré yo, y si él jurare, tornaré yo a jurar, y si porfiare, porfiaré yo más, y de manera que tengo que tener la mía siempre sobre el hito, venga lo que viniere. Quizá con esta porfía acabaré con él que no me envíe otra vez a semejantes mensajerías, viendo cuán mal recado traigo dellas(...)"
B20
ResponderEliminarPregunta 8:
Cuando la aldeana que para Don Quijote era Dulcinea acabó de hacer esta figura, se fue corriendo en su burra por el prado. La burra comenzó a fatigarse y "Dulcinea" se cayó al suelo, haciendo así que Don Quijote fuese a ayudarla. Ella rechazó esta ayuda y nada más se levantó, se fue corriendo.
A22
ResponderEliminarPregunta 1
Estas líneas es donde se sigue fingiendo el autor (primer párrafo)"Llegando el autor desta grande historia a contar lo que en este capítulo cuenta, dice que quisiera pasarle en silencio, temeroso de que no había ser creído, porque las locuras de don Quijote llegaron aquí al término y raya mayores de las que pueden imaginarse, y aun pasaron dos tiros de ballesta más allá de las mayores. Finalmente, aunque con este miedo y recelo, las escribió de la misma manera que las hizo, sin añadir ni quitar a la historia un átomo de la verdad, sin dársele nada por las objeciones Que podían ponerle de mentiroso; y tuvo razón, porque la verdad se adelgaza y no quiebra, y siempre anda sobre la mentira, como el aceite sobre el agua.”
A3
ResponderEliminarPregunta 7
"- "Y has de advertir Sancho que no se contentaron estos traidores de haber vuelto y transformado a mi Dulcinea,sino que la transformaron y volvieron en una figura tan baja y tan fea como la de aquella aldeana.."
A3
ResponderEliminarPregunta 5
-" Reina y princesa y duquesa de la hermosura, vuestra altivez y grandeza sea servida de recibir en su gracia y buen talante al cautivo caballero vuestro, que allí está hecho piedra mármol, todo turbado y sin pulsos de verse ante vuestra magnífica presencia. Yo soy Sancho Panza y él es el asendereado caballero don Quijote de la Mancha, llamado por otro nombre el Caballero de la Triste Figura"
-"¡Oh princesa y señora universal del Toboso! ¿Cómo vuestro magnánimo corazón no se enternece viendo arrodillado ante vuestra sublimada presencia a la columna y sustento de la andante caballería?"
A25
ResponderEliminarCapítulo X
6-Las mujeres se quedaron sorprendidas en silencio, una de ellas para acabar con ese silencio se dirigió a Sancho y a Don Quijote diciéndoles que se apartarán de su camino ya que tenían mucha prisa, Sancho y Don Quijote no hicieron ningún caso y seguían actuando de manera rara. Se acerco otra mujer y afirmó la burla hecha por él caballero y su escudero hacia las mujeres por ser aldeanas, con furia esigio paso para poder continuar su camino. Don Quijote y Sancho cedieron y se apartaron.
A6:
ResponderEliminarPregunta 8:
Finalmente Don Quijote y Sancho dejan ir a la aldeana , y cuando esta ha avanzado ya unos pocos pasos, la montura comienza a moverse y la mujer que Don Quijote cree Dulcinea cae. Él acude en su ayuda pero para cuando la mujer vuelve a subir al caballo por si sola y se marcha corriendo demostrando su habilidad la cual Sancho menciona.